Concesionarios y operadores del transporte público en la Ciudad de México preparan una propuesta para solicitar un subsidio permanente, a fin de enfrentar el alza del diésel y la insuficiencia de la tarifa social vigente. El documento será presentado el 26 de septiembre ante el Congreso capitalino y la Secretaría de Movilidad, con la intención de que se discuta dentro del paquete económico de 2026.
El grupo Movilidad de Vanguardia advirtió que el sector atraviesa una crisis financiera que lo coloca al borde de la desaparición. Señalan que, mientras el precio del diésel se elevó 386% entre 2005 y 2025, la tarifa concesionada apenas se duplicó. El desbalance, sumado a la competencia con sistemas oficiales y al aumento del uso de motocicletas y bicicletas, genera pérdidas insostenibles. La discusión sobre un subsidio abre un debate urgente: ¿debe la ciudad apostar por fortalecer el transporte concesionado o dejar que desaparezca frente a los modelos estatales?