Vecinos de un edificio en Tonalá 125, colonia Roma Norte, denunciaron que la Fiscalía de la Ciudad de México ejecutó un desalojo con violencia durante la madrugada del 26 de agosto. De acuerdo con testimonios, 22 familias fueron expulsadas sin aviso previo, mientras agentes derribaban rejas y puertas. Algunas personas relataron haber sido amenazadas con armas para salir de sus viviendas, sin mediar un proceso judicial claro.
Los afectados acusan que la Fiscalía utiliza acusaciones de otros delitos como pretexto para recuperar inmuebles en disputa o intestados, en beneficio de terceros. El operativo dejó en evidencia un patrón preocupante: desalojos forzados que vulneran el derecho a la vivienda y la seguridad de los habitantes. La ausencia de transparencia y debido proceso alimenta la sospecha de corrupción en el manejo de predios en la capital, un problema que cada vez golpea más fuerte la confianza ciudadana.

