La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo expresó su desacuerdo con la decisión unilateral de Estados Unidos de finalizar el Acuerdo de Suspensión de Tomate Fresco, imponiendo una cuota compensatoria del 17.09% a productores y exportadores mexicanos. Sheinbaum afirmó que esta medida, tomada por el Departamento de Comercio de EUA, tendrá un impacto mayor en su propio país, pues “es muy difícil sustituir el jitomate mexicano”, del cual dos de cada tres tomates consumidos en EUA provienen de México.
La mandataria federal coincidió con asociaciones de productores al señalar que ni a corto ni a mediano plazo existen países que puedan reemplazar el tomate mexicano, que abastece 4 mil 300 millones de las 6 mil 500 millones de libras que consume EU anualmente. Se destacó que productores de Florida, EU, impulsaron este arancel. Sheinbaum anunció que, probablemente la próxima semana, el Plan México incluirá acciones de apoyo para los productores de jitomate y ganado ante estas medidas.