Durante su visita a la embajada brasileña en Washington, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva afirmó que Brasil quiere mantener una relación sólida con Estados Unidos, pero “en igualdad de condiciones”. Aunque no se refirió directamente a temas específicos, Lula insistió en que América Latina no debe aceptar relaciones de subordinación ni en lo económico ni en lo político.
Lula también resaltó que países como Brasil deben ser tratados con la misma seriedad que se da a potencias como China o Rusia. Su postura llega mientras ambos países intentan reactivar el diálogo bilateral tras años de distancia. Al exigir respeto en las negociaciones, el mandatario brasileño plantea una pregunta crucial: ¿América Latina puede tener voz propia sin ser vista como amenaza?

